jueves, 3 de junio de 2010

Nosotros

La libertad de expresión no desde siempre fue mi fuerte, no siempre le hice caso al sentimiento de ira, locura, pasión, emoción ni de amor que habían dentro de mi. De a poco fui siendo más, al punto de no ser agradable para el resto y de no ser agradable hasta para mi propia madre.. pero todo sirvió para poder llegar hasta este punto, el punto donde me miro y digo libremente que

NADIE ME PUEDE PASAR A LLEVAR, NI A MI NI A MIS IDEAS y muchos menos a mis palabras, que con mucho orgullo escribo para ti


sólo para ti


ni menos a este corazón que se muere de amor por ti, que se muere de ganas de disfrutar una vez más de tus caricias y tus defectos, características que con seguridad puedo decir que nadie más posee,

NADIE MÁS

virtudes, facetas, visiones de vida que

NADIE SE PUEDE ATREVER A TOCAR,

porque ni la envidia de los des-graciados, ni la mala fortuna de los in-felices van a poder evitar que yo defienda con todo mi ser nuestra libertad de expresión.






Para Francisca Domínguez, a quien amo y dedico gran parte de mi.

1 comentario:

la cafetera voladora dijo...

AAAAAAAAAAAAAAAAH!
josé ignaaaacio u_u

escribes a ratitos.
a ratitos, goteritas..
pero lo haces tan bonito..
tan como tu sonrisa que me gusta..
que me gusta porque tú nomás
la tienes..

pero esa fooooooooooooto
pero los coloooooores
pero tu bloooooooooog
pero los días treeeeees
pero el invieeeeeeeerno
pero túuuuuu..